Lanzarote

La isla del fuego

A tan sólo 130 kilómetros de la costa de África encontramos Lanzarote, la isla más oriental del Archipiélago canario. Todo el que ha tenido la suerte de conocerla coincide en afirmar que Lanzarote es un auténtico regalo de la naturaleza. Al tratarse de una isla volcánica, de aspecto árido y desértico, está cubierta en gran parte por campos de lava provocados por las erupciones volcánicas que sufrió esta majestuosa tierra en el siglo XVIII.

La hospitalidad de sus habitantes, la calma de sus montañas, la belleza de sus playas o la singularidad de sus monumentos naturales fueron sólo algunos de los rasgos insulares que favorecieron su reconocimiento como Reserva de la Biosfera por parte de la UNESCO en 1993.

El legado del prestigioso arquitecto César Manrique se encuentra intrínsecamente relacionado con el paisaje de esta tierra, pudiéndose disfrutar de muchas de sus creaciones para la celebración de eventos en un entorno tan privilegiado como el de la tierra conejera.

Lanzarote es un destino que no dejará indiferente a ninguno de nuestros clientes.